Vivir con una condición de salud puede ser frustrante en muchas ocasiones, máximo cuando ésta envuelve dolor e incapacidad física, como la endometriosis. Los síntomas que suelen manifestarse con la endometriosis pueden cambiar drásticamente tu calidad de vida; sin embargo existen herramientas que pueden ayudarte a vencer la condición. El empoderamiento es una de esas herramientas. Te explicaré a continuación, cinco pasos que te ayudarán en éste proceso. La idea es que al aplicarlos a tu vida cotidiana logres verte de manera distinta frente a tu condición y puedas sentir que tienes control de la situación. Recuerda que tú vales, tú puedes, porque tú eres!
Cinco pasos vencer la endometriosis
1- Reconocimiento de la Situación
El primer paso es ir a un profesional de la salud, en este caso un ginecólogo, que luego de hacer los exámenes pertinentes pueda ofrecer un diagnóstico certero y completo. Una vez tengas el diagnóstico, es importante informarte acerca de la condición. Conoce tu enfermedad, evalúa que síntomas presentas; en qué fase te encuentras; cómo te está limitando; que alternativas de tratamiento tienes. En otras palabras tienes que ver en donde estás parada respecto a tu condición, para que puedas evaluar tus opciones.
2- Aceptación del Problema
Este es el momento que definirá tu situación. En este punto tienes que reconciliarte con tu “yo” y entender que no es tu culpa tener una enfermedad (aun cuando la sociedad te haga pensar lo contrario). Es crucial que aceptes que la endometriosis tiene un componente físico y un componente emocional. El componente físico estará presente todo el tiempo y será en muchas ocasiones una piedra de tropiezo, sin embargo el componente emocional puede ser tu arma de defensa. “La mente es poderosa”… Dominar tus emociones (como la ira, la decepción, y la tristeza) es algo que tendrás a tu favor y que te va a favorecer en el proceso, evitando que caigas en desajustes emocionales como la depresión y la ansiedad.
3- Fortalecimiento del Autoestima
Trabajar con tu autoestima es hacerte fuerte para enfrentar la condición. Busca tus cualidades personales, descubre tus fortalezas internas, y analiza cuales son tus recursos (incluye en este análisis a tus redes de apoyo) y aférrate a ellos. Tienes que hacer un proceso reflexivo para que puedas entender que tener endometriosis no cambia quien eres. La endometriosis no te resta nada como persona. Tu padeces de endometriosis, pero la endometriosis no te define y no cambia tu esencia. De nuevo, te recuerdo la importancia del componente emocional. Si te enfocas en mejorar tu autoestima, la manera de verte ante la endometriosis, así como la forma de reaccionar a sus embates, cambiará significativamente.
4- Redirección de Metas
La endometriosis no dirige tu vida. Tener esta condición puede limitarte físicamente, eso es una realidad con la que tienes que lidiar. Los síntomas de la condición y los efectos de los tratamientos serán, en muchas ocasiones, un desafío en nuestro diario vivir. Identifícalos! Aprende a conocer la manera en que tu cuerpo reacciona y entonces trata de ajustarte a tu realidad. No renuncies a tus metas, solo cambia la forma de llegar a ellas. Talvez no podrás trabajar a tiempo completo en una empresa, pero puedes trabajar a tiempo parcial o emprender una microempresa desde tu hogar. Trázate metas realistas, tomando en cuenta tu estado de salud actual y procura que esas metas sean a corto plazo, para que puedas ver resultados. Recuerda que nada es lineal en la vida; somos seres cambiantes, por lo que si algo no funciona, buscamos otra forma de hacerlo.
5- Resiliencia
Por último el paso más complejo, pero también el mas satisfactorio: vencer la adversidad. Ser resiliente es salir adelante en la vida a pesar las cosas difíciles que nos tocan vivir y en ese proceso convertirnos en mejores personas de lo que éramos antes. Todos los seres humanos son valiosos. Somos capaces de usar positivamente nuestras fortalezas; transformar nuestras debilidades en capacidades; y maximizar nuestro potencial para nuestro bienestar social, emocional y espiritual. Las crisis provocan cambios, pero no tengas miedo, porque los cambios te dan la oportunidad de crecer y madurar. Ahora bien, la resiliencia envuelve un proceso de lucha y transformación, en el cual nosotros tenemos un rol activo y decisivo. Tú tienes que estar dispuesta a perseverar en el proceso, tienes que estar abierta a nuevas posibilidades y a cambiar áreas de tu vida. En ese devenir, muchas cosas no saldrán como esperabas, tendrás caídas, pero “si 100 veces nos caemos 101 veces nos levantamos”. Así es como nos volvemos fuertes y poderosas para pararnos firmes frente a la endometriosis y derrotarla.
Por: Maricely Cruz Laboy
Trabajadora Social Clínica (MSW)
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